Halloween es un evento que se ha implantado en la sociedad en los últimos años, sobre todo entre los más pequeños de la casa por muchos motivos que no entramos a enumerar ni valorar.
En el mismo las personas se disfrazan y algunos piden dulces por las casas. Es posible que muchas personas TEA no puedan vestirse como sus compañeros debido a sus sensibilidades sensoriales, por lo que es importante asegurarse de que tengan una experiencia divertida y cómoda en Halloween. El disfraz puede picar; las luces, gritos y la música les pueden resultar estridentes y molestas; la incertidumbre del «dulce o travesura» o los nervios frente a las diversas situaciones pueden suscitar episodios estresantes o de crisis.
Las siguientes recomendaciones pretenden aportar una visión que permita integrar e incluir a los niños en el proceso de interacción social este evento cada vez más popular. El objetivo es integrar a las personas con la condición a e intentar convertir la fiesta en un pequeño aprendizaje para las cosas del día a día.
Consejos para preparar Halloween para personas con TEA:
- La preparación y anticipación es fundamental. Hay que intentar explicarle a las niñas o niños tan claramente como sea posible qué es lo que sucede en Halloween.
- Se recomienda usar fotos, pictogramas o dibujos para explicar o anticipar. Si se requiere de más apoyo, hay películas y dibujos animados que pueden ayudar.
- A las niñas y niños que son más literales se les puede recalcar que algunas cosas pueden asustar, pero nada es real. Explicarle que es una fiesta, que es divertido.
- Basarse en las preferencias del niño o la niña para celebrarlo, conociendo muy bien sus gustos, las cosas que le molestan o lo que le incomoda.
- Elegir bien el disfraz. Evitar máscaras, capas o complementos (espadas, escudos, escobas, etc). Cuanto más sencillo, mejor.
- Que la niña o el niño juegue antes con el disfraz, mostrarle la ruta que harán o repartir anticipadamente los dulces o premios favoritos entre los vecinos.
- Si la niña o el niño tiene dificultades del habla o es preverbal, es bueno diseñar unas tarjetas con su nombre y las frases más comunes que sirven para participar de la fiesta.
- Haz especial hincapié en que algunas cosas pueden asustar pero que no es sangre de verdad ni el cuchillo atraviesa la cabeza. Recuerda que muchas personas con TEA toman las cosas de una forma literal. Que sepa que Halloween es una fiesta para pasarlo bien, que es divertido.
- Considerar agregar auriculares u orejeras con cancelación de ruido a su disfraz si es sensible a los sonidos fuertes
- Puedes hablar con algún vecino para que sus hijos vengan a tu casa antes del propio Halloween o, si ves que está por la labor, ir con tu hijo a hacer una prueba a ver qué tal. Tu hijo puede tener un pequeño premio si lo ha hecho bien o ha llevado bien la situación.
- Puedes repartir entre tus vecinos unos dulces o unas recompensas que sepas que a tu hijo le van a encantar. Puede evitar alguna frustración y aumentar el éxito de la experiencia.
- Intenta que le acompañen personas que tu hijo quiera mucho.
Esperamos te sean de ayuda estos consejos y te sientas libre de compartir tus experiencias para poder mejorar la experiencia de todos.